Pueblos

Lekaroz

Apacible y risueño pueblo, vecino de Irurita, Elizondo y Gartzain, que goza de una privilegiada ubicación. Cobijado bajo la sombra del mítico monte de Legate, cuenta Lekaroz, o Lekarotz, con los siguientes barrios: Arrazkazan, Huarte, Aroztegia, Oharriz y Orabidea/Olabidea.

Arrow
Arrow
PlayPause
Shadow
Slider

La Guerra Carlista marcó indudablemente la historia de esta pueblo. En marzo de 1835, en plena contienda entre carlistas y liberales, Espoz y Mina desahoga aquí sus iras.

Ante la resistencia de los lekaroztarras de brindarle al general información acerca del paradero de ciertas personas, saca a la plaza a una treintena de hombres y decide fusilarlos. Posteriormente da fuego al pueblo calcinándolo casi en su totalidad, resultando la iglesia de San Bartolomé y tres casas más las únicas supervivientes de la piromanía de Espoz y Mina.

El colegio de Lekaroz

Otra de las señas de identidad de Lekaroz es sin duda el Colegio que los capuchinos fundaron a finales del s.XIX (el 22 de abril de 1888 se puso la primera piedra), que nació con vocación de “Seminario Seráfico Capuchino para las misiones de España y ultramar”. Este seminario, que mantuvo siempre un espíritu constructivo y laborioso en favor de la cultura y la educación, estableció en 1898 un estudio de Bachiller y Comercio, que compartiría el edificio con los seminaristas.

colegio_lekarozLa historia del Colegio es larga y densa: durante la Guerra Civil hizo las veces de hospital, en 1941 inició el externado, y a finales del 62 sufrió un incendio que obligó a acelerar la construcción de un nuevo Colegio, que vería la luz en 1967. Pero, tras una fructífera etapa, la falta de frailes capuchinos que continuasen esta labor (la decadencia de esta Orden sigue la tónica de muchos otros grupos religiosos venidos a menos) confinó a los últimos al viejo edificio, siendo el Colegio comprado por el Gobierno de Navarra a finales de los ochenta y reconvertido a Instituto para la zona de Baztan.

Cabe citar a algunos capuchinos ilustres, que en casos concretos han sido además estudiosos e interesados en los ritos y tradiciones del Valle: el Padre Donosti, Hilario Olazarán, Jorge de Riezu, Eulogio Zudaire, Vidal Pérez de Villareal, Francisco Ondarra…

Volviendo propiamente al pueblo, destacan en él dos Palacios de Cabo de Armería: el de Arozteguia, cerca del pueblo, y el de Oharriz, en el que nació Agustín Jáuregui de Aldecoa, que sería gobernador de Chile y Virrey de Peru. En cuanto a su entorno geográfico, decir que el nucleo de Lekaroz está en un alto, pero respaldado como queda dicho por los montes Larrazu/Urrizketa-Legate, unidos ambos por el collado de Arakan, lugares de un especial encanto y significado prehistórico, por la presencia de varios dolmenes megalíticos.

Legate está además cortado a pico sobre el vallecito de Olabidea, un pequeño paraíso virgen, que linda con el boscoso Señorío de Bertiz, que a su vez culmina en Aizkolegui con un palacio ahora en desuso que el excéntrico D. Pedro Ciga mandó construir en su cima.

En el aspecto culinario hay que hablar de la famosa “tortilla de patata de Lekaroz”, plato típico elaborado con esmero por los de aquí y que figura en no pocos menús festivos y tradicionales de todo el Valle. Según parece, el secreto está en freír la patata con manteca de cerdo en lugar de aceite, lo que le da un sabor sobresaliente y característico.